¿Qué podemos hacer frente al Cierre del Relleno Sanitario?

Buenas Prácticas Circulares para los Ciudadanos y Empresas

Ante el Cierre Inminente del Relleno Sanitario del Carrasco, en la ciudad de Bucaramanga, se plantea el gran Reto que asume la ciudadanía, el sector comercial y empresarial; frente al manejo, gestión y disposición final de una cantidad aproximada de más de 930 toneladas diarias de basuras, procedentes de Bucaramanga y de 16 municipios de Santander, que no tendrían donde disponerse correctamente.  

Esta situación representa un alto riesgo a nivel sanitario y del medio ambiente, debido a la acumulación de las basuras de manera descontrolada, trayendo consigo graves afectaciones, tales como: proliferación de roedores, propagación de enfermedades, malos olores, contaminación de fuentes hídricas, disposición de basuras en lugares no adecuados, entre otros.

De acuerdo al panorama anterior, surge la siguiente pregunta …    ¿Qué podemos hacer?

Antes de plantear las Buenas Prácticas Circulares que todos podremos adoptar, es muy importante entender por parte de los ciudadanos, comerciantes, empresarios y de los líderes del gobierno local, que No se trata solo de solucionar el traslado de las basuras y de identificar un lugar para la disposición final de los residuos; debemos ir mucho más allá y EVOLUCIONAR en la forma en la que consumimos y producimos, y por lo tanto la forma en la que generamos los residuos y el manejo que le damos a cada uno de ellos desde los diferentes roles que interactúan, tales como: Empresas, Negocios, Usuarios, Ciudadanos y Líderes locales.

Debemos trascender y entender que no es SOSTENIBLE desde el punto de vista (Económico, Ambiental y Social) continuar generando los volúmenes de basuras actuales, por la sencilla razón, de que el ritmo de generación de residuos actual, supera y desborda la capacidad de disposición final de las basuras, ya que las basuras No desaparecen por arte de magia, se entierra y allí estarán por cientos de años, por lo tanto, continuar con el mismo comportamiento, implica que cada vez se requieran nuevos y mayores espacios para enterrar la basura.  

La Economía Circular nos plantea un cambio de mentalidad, comportamental y de fondo frente al paradigma Lineal, es decir frente nuestra forma de producir y consumir actualmente, en la que usamos un producto y lo desechamos, considerándolo como una basura y que por lo tanto ya no nos sirve más.  Nuestra concepción sobre lo que compone la “basura” debe cambiar entendiendo el potencial del aprovechamiento de los diferentes tipos de materiales antes de considerarlos como un residuo, dejando de lado el “Pensamiento Desechable”, en el que un producto se usa una sola vez y se desecha, sin importar donde irá a parar y que daño puede llegar a ocasionar al Medio Ambiente.

A continuación, presentaremos Buenas Prácticas Circulares, que, desde el enfoque de la Economía Circular, son acertadas para gestionar correctamente este Reto que debemos afrontar referente al manejo de las basuras.


¿Qué podemos hacer en nuestro hogar?

  1. Realizar un Consumo Consciente, inicia por entender y dimensionar que residuos se van a generar a partir de mi consumo, de tal manera que actúo de manera responsable.
  2. Eliminar los desperdicios de comida, Cero desperdicios de comida, cocinar y determinar las cantidades exactas y que verdaderamente serán consumidas en el hogar, eliminando las pérdidas de alimentos y por lo tanto la generación de residuos.
  3. Rechazar y evitar los plásticos de un solo uso, Cero desechables.
  4. Reutilizar y usar por varias veces los elementos, sin necesidad de tirarlos y generar residuos. 
  5. Reparar los elementos para prolongar su vida útil y así evitar que se conviertan en basura.
  6. Emplear los materiales para usos complementarios y adicionales para los que fueron inicialmente diseñados.
  7. Separar correctamente los residuos, recordar que, si juntamos todos los residuos en una misma bolsa, podemos considerarlo como “Basura”, sin embargo, en la medida en la que separamos los Residuos Aprovechables, los Residuos Orgánicos y los Residuos No Aprovechables, disminuimos su volumen y los podremos considerar como Materiales, para aprovecharlos posteriormente y evitar que se conviertan en basura.  
  8. Reciclar, aportar y entregar los materiales aprovechables (papel, cartón, aluminio, botellas y tapas plásticas, empaques plásticos limpios, ropa, entre otros) a los recicladores de oficio y facilitar su labor. 
  9. Emplear los puntos verdes ubicados en centros comerciales para la disposición final de residuos especiales, tales como: aceite usado, baterías, bombillos Led, medicamentos vencidos, residuos electrónicos, celulares, computadores, entre otros.
  10. Compostar los Residuos Orgánicos, los cuales se pueden biodegradar de manera controlada con una mayor facilidad en los hogares que dispongan de un jardín o patio.  Sin embargo, existen soluciones comerciales para realizar este proceso de compostaje en los hogares, sin necesidad de disponer de áreas verdes, sin el problema de la generación de olores, plagas o lixiviados.


¿Qué pueden hacer los Negocios y las Empresas?

  1. Eliminar el uso de productos desechables y de un solo uso.
  2. Reducir y eliminar los empaques plásticos, que en muchas oportunidades llegan a ser innecesarios.
  3. Promover la reutilización de los empaques, recipientes y/o productos ofrecidos.
  4. Plantear Nuevos Modelos de Negocio basados en Servicios en los que se Reutilicen los empaques, recipientes y/o productos y la oferta de valor se centre en el uso de los productos y no en la propiedad de los mismos. 
  5. Implementar la logística inversa, recolección de los productos y empaques usados y al finalizar su ciclo de vida con la finalidad de aprovecharlos y reincorporarlos al proceso. 
  6. Implementar el Ecodiseño, diseñar productos sostenibles, contemplar desde la etapa de diseño de sus productos cual va a ser el material, el empaque, su modelo de reutilización y el ciclo de vida; identificando que impactos ambientales pueden llegar a generarse al finalizar su ciclo de vida para eliminarlos o en su defecto reducirlos al máximo desde la concepción de la idea.
  7. Eliminar al máximo el uso del papel mediante la digitalización de sus procesos y la Transformación Digital. 
  8. Aprovechar e identificar un uso especifico para los residuos de la producción, generando alianzas entre empresas, para implementar la simbiosis industrial, generando la colaboración entre las empresas, ya que los residuos de una empresa pueden ser los insumos para el proceso de otra empresa.  
  9. Incluir un porcentaje de material reciclado en los nuevos productos y así disminuir el uso de materiales nuevos.
  10. Reciclar y separar correctamente los materiales aprovechables resultantes de la actividad económica, los cuales podrán ser suministrados a un Gestor Ambiental o empresa de Reciclaje.
  11. Plantear Estrategias Circulares a partir de Soluciones Innovadoras que permitan prolongar la vida útil de los productos y el aprovechamiento de los materiales. 
  12. Incentivar las Compras Locales y promover los criterios de Sostenibilidad Ambiental en las compras a los Proveedores.


En conclusión, este cambio de mentalidad implica un proceso de transición, tanto de los ciudadanos, como de las empresas, más específicamente en las empresas, para que se adapten y realicen ajustes en sus procesos, durante toda su Cadena de Valor y diseñen nuevos productos que sean Sostenibles, incluso a partir de Nuevos Modelos de Negocio en los que se reflejen las Estrategias Circulares y se generen beneficios ambientales y económicos en las empresas.

Se visualiza como una Solución a corto plazo un relleno sanitario para la disposición final de las basuras, sin embargo, la verdadera solución consiste en realizar un consumo consciente, una correcta separación desde la fuente, el aprovechamiento de los materiales, prolongar la vida útil de las cosas, el reciclaje y las demás estrategias que hemos descrito en los puntos anteriores, con la finalidad de reducir significativamente los volúmenes de residuos generados desde los hogares, los negocios y las empresas; y por lo tanto reducir el volumen de “basuras” a aquellos elementos que realmente No sean aprovechables.  

De no adoptar este cambio, el problema seguirá vigente y tanto las empresas como los ciudadanos y sus gobernantes seremos los responsables de continuar contaminando el medio ambiente a partir de un uso ineficiente de los recursos y de una anticuada perspectiva frente a la gestión de los residuos.

Por lo tanto, la meta deberá centrarse en cambiar el Paradigma de Consumo Lineal y empezar a ser Circulares, para lograr el Máximo aprovechamiento de los materiales y minimizar así la generación de residuos. 

Esta situación representa una gran Oportunidad para que la Ciudad Bonita acelere su transición hacia la Economía Circular a partir de la implementación de las Buenas Prácticas y Estrategias Circulares descritas anteriormente y mediante el establecimiento de incentivos para el fortalecimiento de las capacidades locales en el aprovechamiento y la transformación de materiales.


Desde CEC el Centro de Economía Circular acompañamos a las empresas en plantear Soluciones, Estrategias y Nuevos Modelos de Negocio basados en la Economía Circular, logrando eliminar la generación de los residuos desde la fuente y definiendo los mecanismos para el aprovechamiento de los recursos.  Acompañamos en la identificación e implementación de Planes de Acción para su transición hacia la Economía Circular.


Luis Felipe Ordóñez

Director 

CEC – Centro Economía Circular

Cel: 3144723762

director@cec.expert